sábado, 4 de octubre de 2014

Reflexiones de una tarde de Octubre.

Me tomaste de la mano. Y sentí como te apretabas a mi con tus temores de niño grande. Y me emocionó saber, que te doy seguridad aun.  Que aunque estas creciendo como loco, ese lazo de madre e hijo es cada día mas grande y mas tierno.

Últimamente me emociono por todo, será que ya estoy poniéndome grande, o será que cada día que pasa, dejo lugar en mi, para que las emociones del alma y del corazón se apoderen de mis sentidos, aunque no tengan sentido.
El otro día me encontré con lágrimas en los ojos, porque vi una nota en la que un maestro en Catamarca, hace 100 kilómetros por día  en una moto, por la tierra y el salitre, para ir a enseñar a solo 6 chicos. Y el ver esas caritas de felicidad, de amor y de ganas de aprender, con sus sueños de futuro en una sonrisa de guardapolvo blanco, me enternecieron de un modo que no creí posible.

Son esas cosas que están a nuestro alrededor, tan pequeñas pero tan grandes a la vez. Esas cosas como tu abrazo, querido hijo, las que me llenan la vida.
Hacen que los silencios se vuelvan canto y que las palabras cobren vida.
A veces miro fotos de cuando eras chiquito y hablabas con media lengua y no puedo creer que tengo ante mi ya casi un hombre.
El tiempo pasa corriendo casi sin que nos demos cuenta.
Hay que hacer balances cada tanto, y permitirse el llanto, la emoción, la alegría o la tristeza. Porque de eso se trata esto, la vida. De un conjunto de momentos para atesorar de mil maneras. En palabras, en fotos, en abrazos, en canciones de cuna o como se nos de mejor.

Y siempre hay tiempo para dar vuelta las páginas que no son agradables, siempre hay tiempo de encontrar una hoja en blanco y empezar a escribir de nuevo el camino. No hay un solo camino, no hay una sola hoja de ruta. Nada está escrito en piedra. Solo las lápidas.
Entonces, con la brújula del corazón en la mano, podemos decidir cambiar, mejorar y volver a creer.

Es solo eso, un poco de fe puesta en nosotros mismos. Que al fin y al cabo, somos imperfectos, y por lo tanto, humanos con todas las letras.


jueves, 21 de agosto de 2014

Mensajes de amor

(Una recopilación de párrafos que encontré por ahí y que escribí hace como, un millón de años)


En el más recóndito lugar de mi alma encontré latente un mundo de sentimientos perdidos: La pasión,  la fantasía,  el amor y la poesía. Dormidos he invernando, como esperando a un ser o a una palabra mágica. Allí estaban todos, como aguardándote a ti y a tu mirada. Es increíble cómo de repente, este hecho puede conmoverte y ya nada te parece igual. Todo cambia y se ve tan diferente. Y cada día al despertar,  un nuevo desafío te estremece; y en lo profundo sentís que vale la pena estar vivo.

El sol se escondió detrás de la nube de aguas rojas y su luz que atravesaba las gotas y la espuma, formó un arco iris inmenso que desbordaba la vista. Y casi sin que me diera cuenta, se fueron apagando sus colores, mientras crecía y crecía,  tu imagen en mi corazón. El recuerdo de los besos robados en silencio, de las caricias y de tus ojos mirándome con su eterno color, con ese tono mágico que transformaba mi alma. Y nuestro amor enorme como un gigante,  enfrentando todos los fantasmas,  descubriendo todo lo que llevamos dentro. Despojado el corazón de cualquier duda,  sellados los labios por todas las promesas nunca hechas. Promesas de amor, lazos invisibles, lazos tan fuertes como los abrazos,  con los que nos dijimos, te amo. Ese amor, esa sed de estar juntos, de bebernos el tiempo de un sorbo. De dejarnos caer en un profundo sueño: el de dos almas desesperadas la una por la otra. Con el corazón abierto, con el alma expuesta,  sintiendo tan profundo, como ese río que tuve ante mis ojos. Y más fuerte que ese bosque, que se perdía de vista en el horizonte.

No puedo dejar de pensar en vos. Estás ahí.  Simplemente tú recuerdo descansando en mi alma, como una gran fotografía de color. Y esos labios que me dieron calor un día, me sonríen tan suavemente, como me besaron. La sensación de esa última caricia, aún ardiendo en mi piel. Una inesperada mirada de lejana intensidad. Estás, fuiste, eres;  no lo sé. Pero si se, qué no podré borrarte así nomás, como se vuela una hoja con el viento de otoño.  Y muy seguramente la nieve del invierno, cubrirá todas las huellas de tus pasos y de los míos. Y cuando la primavera llegue, otros árboles florecerán en mí.  Y en silencio, sonreiré por mi pasado. No será la primera vez;  ni creo que la última.  Nada es eterno;  sólo el tiempo que corre, en ese incansable reloj.

La luna me mira con sus pálidos ojos plateados y ahí donde su mundo nocturno existe, el reflejo en el espejo del mar y la arena aún tibia, me recuerdan a ti. Aquel momento infinito, aquel oasis. Como una salada caricia con gusto a amor eterno. Como olvidarlo. La húmeda brisa no me dejaba ver tus ojos,  pero adivinaba miradas de miel y de dulzura. A veces pienso que fue un sueño: El más bello. A veces pienso que esa luna, ese mar y esa arena,  están esperando con ansia que algún día regresemos, a proseguir con nuestro amor;  a terminar con nuestras penas y a sentir que nuestros corazones son como uno solo, latiendo juntos para siempre.

Ese momento de felicidad fue tan efímero, como un puñado de arena seca escurriéndose en la mano. Ese instante en que el alma extiende su esplendor y brilla al desnudo,  llenándose de armonía. Ese tiempo,  en el que esperamos con ansia que llegue el día,  para vivirlo en toda su plenitud. La vida es sólo eso la suma de momentos, de instantes y de tiempos. De ese deseo interno de estar en paz.

Fuiste para mí como un cálido refugio, como un oasis qué calmó mi sed,  como una isla donde pude ser feliz por un momento fugaz. Fuiste mi apoyo, mi amigo, mi amante.  Fuiste ese murmullo de arroyo en el campo, esa sensación de paz que da mirar las estrellas en una noche clara. Fuiste ternura infinita, fuiste una caricia en mi piel. Fuiste un amanecer con un sol tan rojo como el fuego. ¡Fuiste tantas cosas!


Quisiera despedirme. Si. Con algo de nostalgia, con algo de tristeza, no sé,  así nomás. Y como siempre, huyendo,  desapareciendo, escapando: hacia algún lugar donde tu espacio no me alcance. Espero que la vida te sonría y que alguna vez de tanto en tanto me recuerdes como yo lo haré contigo.

miércoles, 16 de julio de 2014

Reflexión corta en una mañana soleada.

Cuando se disipan las sombras en el fondo del alma y se aclara el sentido de ser, en un instante que parece eterno, esos recuerdos que estaban olvidados se nos presentan tan reales, como si estuviéramos viviendolos nuevamente.
Y ese velo que se corre, nos deja ver todo lo pasado,  con tal nitidez, que no podemos creer que no hubiese sucedido antes.
Esa búsqueda de verdades y de hechos reales que pasaron en nuestras vidas, esa búsqueda de causas de las cuales hoy somos resultado.
Infinitesimales momentos desaparecidos, que vuelven e inundan de pronto nuestra mente y corazón, como un torbellino imparable.
Y desde el punto en donde nos encontramos parados ahora, vemos con otra perspectiva y otro ángulo, esas cosas que tanto nos hacen felices, como nos atormentan.
Y en ese fluir de sentimientos, pensamientos y verdades, nos descubrimos siendo lo que somos.
Y se nos da la oportunidad única de cambiar lo que está mal, de mejorar lo que está bien y de empezar de nuevo.

Y de eso se trata. Una sumatoria infinita de nuevos comienzos, en donde los viejos ocasos, se transforman en luminosos amaneceres.

martes, 1 de julio de 2014

Conversando con mamá.


Que te puedo contar... llueve. Y estaba pensando en que fue un día bueno. Como tantos otros. 
De repente sentí que tenia que escribirte. Solo una seguidilla de pensamientos, cosas que te diría si aparecieras a la vuelta de la esquina.
No sabes lo grande que esta Fran. Enorme, ni yo me lo puedo creer. Con voz gruesa, atrapado por la tecnología. Mezcla de hombrecito, niño, adolescente. Que se yo! De golpe me abraza fuerte. Ma, te quiero! De golpe peleamos como locos! 
No se que hará en el futuro, cuando era mas chico quiso ser un montón de cosas... no, no quiso ser bombero... nunca. Arquitecto, Chef, trabajar en Apple, ahora dice que quiere ser publicitario! 
Es un personaje de pocas palabras. Observador, como pocos. Hace unas imitaciones que te morís. De todo y de todos. Es el espejo de nuestras vidas... sabe cuales son nuestros puntos débiles y los refleja en su imitación certera. 
No paramos de reírnos y a veces nos hace bien, nos muestra como somos. Nos hace reflexionar!
Es una lucha de adolescencia, amigos, ser aceptado y querido son sus metas mas importantes por estos días. El colegio es un capítulo aparte. A veces dice para que tengo que estudiar esto o aquello, para que? Muchas veces tiene razón, aunque no se la doy por principio. No le gustan los deportes, aunque fue a clases de tenis por tres años, Fabián mediante, claro. 
Al menos algo le habrá quedado, para cuando sea mayor... 
Dibuja como los dioses. Pero no le interesa. No mas. Antes era una máquina, dibujaba todo el día, creaba, se divertía. Hoy no lo hace ni para la clase de arte. Que de hecho la tiene abajo. 
Es vago, si, bastante... y todavía recuerda a pesar que solo tenia cuatro, de que se come con la boca cerrada, “como una cajita”, como solías decirle. 
Lo amabas, me consta. No se como se llevarían hoy. Es de tu mismo signo, crítico de todo. Te suena un poco? No cree mucho en Dios, ni en el mas allá, es mas bien literal. 
Cree en lo que ve, palpa, toca. El otro día me dijo que es ateo. Casi me desmayo. 
Es tímido. No le gusta ser el centro de nada. Hasta que entra en confianza, por supuesto. Ahí, es el clown.
Lo adoro y es muy cariñoso conmigo. Pero peleamos bastante. En eso me parezco a vos. Soy extremadamente exigente. Es que es corto el tiempo que estamos junto a los seres que queremos, y lo único que puedo dejarle son mis pensamientos, mis convicciones, mis principios, mis enseñanzas. Correctas o erróneas. 
Siempre pido tiempo, para poder irme sabiendo que encontró su camino, su misión en este mundo y lo que lo haga feliz...

Y no te podes imaginar, lo grande que esta Clarita, es una mujer ya, y somos amigas, creo. Eso me hace inmensamente feliz. Es muy compañera. Y siempre esta ahí. Es linda, muy linda. Es una mezcla de ambos, en todo sentido. Un poco obsesiva a veces, con su pelo, sus cosas. Me enteré no hace mucho que cuando iba todavía al cole, me tenía miedo! Tremenda noticia... ya que le exigí mucho solo hasta sexto grado, después ya voló sola. Es sumamente responsable. Es otra fanática de estar conectada con el mundo y con sus amigos del “éter” para vos... de la nube, de las redes, bueno... no sabrías de que te estoy hablando... ya pasaron 10 años y todo cambió tanto ...
Clari va a a la facultad. Hace ya tres años que estudia derecho. Me parece que le gusta. Trabaja en un estudio. Se lo toma muy a pecho. Mucho. 
Me preocupa que se lo tome tan en serio tan chica, porque la verdad, a esta edad es cuando uno tiene que ser un poco trotamundos... quizás estoy proyectando, porque eso es lo que yo haría si volviera a tener 21. 
Le gusta cantar. Tiene una memoria tremenda. Se acuerda todas las letras de todo, con solo escuchar una vez. Tiene una muy linda voz. Aunque pienso que aun no sabe elegir las canciones que le quedan bien... ahí estoy de nuevo, un poco vos. Podría ser una gran interprete. Pero no se tiene fe. Confianza, que se yo! Ya va a caer en la cuenta, la quiero tanto mama! 
Estuvo de novia un año, el era un año mas chico, karma familiar? Y bueno, todo terminó. Hoy ya esta curada de ese “primer amor”, y anda por la vida buscando a alguien. Espero que aparezca una persona excepcional, que la haga feliz. Eso. Muy feliz.
Me cuenta bastantes cosas, muchas te diría. Tal vez como solíamos contarnos con vos hace tiempo... Extraño eso. 
No te estoy hablando de mi, lo notaste? Es que cuando tienes hijos, es como que uno se pone en segundo plano... 
Pero si, te voy a contar que en estos diez años algo he madurado... algo... no tanto!
Seguimos juntos con Fabián y la verdad tratamos de descubrirnos y volver a gustarnos cuando podemos. Aunque hubo un tiempo en que estuvimos separados. Casi año y medio. Fue tiempo de reflexión. Nos volvimos a elegir. Nos casamos por la Iglesia, como Lalita quería, un domingo cualquiera de Julio, en plena epidemia de gripe A. Puse la música de la misión, esa que te gustaba tanto! Después de misa. Lloraban todos. Fue muy emocionante. Estuviste ahí conmigo, lo se... 
Entre de la mano con Fran, que con sus 9 y su timidez, fue mi bastón.  La ceremonia fue en San Gabriel. Una larga entrada, vestidos de civil, con un ramo que Celina me consiguió. Al igual que tu ramo inolvidable que me mandaste el día de mi casamiento por civil. Te acordás? 
Se me llenan los ojos de lágrimas. Diez años vieja, la pucha que pasa el tiempo corriendo, imparable. Diez años!
Sigo sacando fotos. Pero ahora las máquinas son digitales...las últimas fotos con vos, fueron con mi primera maquina digital. Era lo mas nuevo que había. Hoy saco fotos hasta con el teléfono. 
De tanto en tanto toco la guitarra. Saco alguna canción. De hecho estoy nuevamente entusiasmada. A pesar que la voz me da solo para algún blues Jazzero.
Todavía sigo fumando. No lo pude dejar. Dejé el golf. Sigo haciendo teatro de padres. Es mi año numero 12. Y lo increíble es que nunca pudiste ir a verme actuar!. Hago escenografía. El año pasado hasta me cosí el traje de Mrs. McGonagall, capa y sombrero con plumas. Hubiese visto Lala, lo que aun puedo hacer con su vieja y tan cuidada Elna. Es increíble, que aún esté todo, hasta el  manual de instrucciones y el aceitero con que Papú la hidrataba anualmente!
De nuevo se me llenan los ojos de lagrimas. 
Me acerque mucho a la iglesia estos últimos años, eso me consuela, es como mi terapia. Ayudo a cantar en las misas. Y este último año participe de la nueva revista de la parroquia. En prensa, escribiendo notas, haciendo entrevistas y reportajes. este año me lo voy a tomar con mas calma. 
Sigo trabajando. Pero en una radio que seguramente no conoces. Es divertido. Lo paso bien. Tengo un buen jefe y unos excelentes compañeros. Que mas se puede pedir?
Y la pareja, va y viene, como todas. Pero estamos bien. Ya son 22 años. Una vida no? 
Sigo dibujando, de tanto en tanto. Pero lo hago en una tableta. Si, en una tableta digital. Es algo loco no? A veces agarro mis lápices y mis pinceles, o los pasteles... y me ensaño con una tela. Pero la mayor parte de las veces, uso mi tableta. No copio. Creo mis propias cosas. 
Escribo un blog. Empecé hace algunos años. Este último lo tuve bastante abandonado... tengo que retomar. También tengo un sitio de fotos en internet. Donde la gente de cualquier lado del mundo puede ver mis fotos. 
Sigo haciendo pulseras, collares y esas cosas. Este año se me dio por bordar. Lo podes creer? Bordado libre. Y por tejer al crochet. Y tengo un canasto lleno de hilos, lanas y miles de materiales, que no se en que momento voy a terminar de hacer. O empezar. Por eso te digo, que madure, solo un poco. En el fondo, sigo siendo la misma de siempre. Un desorden completo. 
El año pasado pague todo el año el gimnasio y fui solo un mes. Si, solo un mes. No puedo quedarme quieta. 
Rezo mucho. Mucho. Por muchas personas que a veces ni conozco. Siempre espero que ese pequeño granito de arena, haga algo bueno. Aunque sea llevar buena energía a las personas. 
Manejo mucho. Protesto y parezco un tachero en la calle. No me interesa mas la política. Me volví socialista. Me preocupa la desigualdad enorme que hay en este mundo. Las grandes diferencias. No creo que a esta altura tenga tiempo de hacer mucho por mejorarlo. Por eso es que rezo. 
Tenemos un papa argentino. Bergoglio. Seguramente lo recordaras. Que increíble que eligiera el nombre de Francisco. Acaba de nombrar santo a Juan Pablo II. Que se fue casi cuando vos. 
Papá estuvo muy enfermo con cáncer. Un linfoma. Se curó. Yo creo que fue un milagro. Y aunque los fantasmas siempre están y le quedaron algunas secuelas de los remedios y las quimios, por suerte nunca perdió el humor y el optimismo. Tiene sus bajones. Como no tenerlos? Pero siempre le pone el pecho a las balas y ahí esta, firme, peleando la vida. Y haciendo chistes muy malos, como es su costumbre!

Sigue lloviendo. Tengo un montón de cosas mas que contarte... pero creo que ya las sabes, no? Te extraño. 

María, 27 de marzo de 2014.

lunes, 31 de marzo de 2014

Reflexiones de otoño.

Hace tiempo, mi pluma virtual, está completamente muda. 
Es el ejercicio de escribir el que abandonado hace que no sepa por donde empezar.
Algún chistoso, diría: por el principio. Pero a veces no hay principios, no hay finales. Solo andar. Fluir a través de las palabras, los espacios en blanco y las negras letras del alfabeto.
Un sin número de pensamientos cruzan de pronto mi mente y no logro enfocar en ninguno en concreto. Es básicamente casi como soy yo. Un sin fin de ideas y de planes y de cosas para hacer. Pero que al final, nunca ven su horizonte claro y definido...
Muchas veces me he reprochado no elegir algo y ser la mejor en eso. Muchas veces recordé la parábola de los talentos, y me sentí como el que enterró su talento y no hizo nada con el. Claramente, culpable.
Tal vez se deba a los mandatos. Tal vez no. Pero ahora que tengo un montón de años, me doy cuenta de cuanta cosa ha quedado olvidada en el tintero.
En el tintero de la vida, quiero decir. Ese tintero con el que vamos escribiendo nuestra pequeña historia, tan simple y sencilla que quizás no sirva para ser parte de un libro. 
Cuando vamos caminando por la vida, vamos enlazando a cada paso vínculos de todo tipo, y esos lazos invisibles, van de a poco fundiéndose con nuestra alma y nuestro corazón. A veces ni nos damos cuenta, lo importante que son o que fueron algunas personas que hemos conocido. Y algunas que ni siquiera saben, el lugar que ocupan o que ocuparon en nuestro recorrido. 
Cuando me detengo alguna vez a mirar por encima del hombro, ese pasado que hoy parece tan lejano, siempre veo muchas almas llenas de amor que hoy forman parte de mi ser. No niego que también hubo personas que tal vez nos hicieron mal. Pero también eso nos fortalece al final y creo que de lo difícil y complicado, también aprendemos y crecemos.
Constantemente me pregunto si he hecho las cosas bien, o si hago las cosas bien, o como podría hacerlas mejor... a veces cual el memorioso Funes, pensamos, recordamos y analizamos tanto, que nos olvidamos de vivir. Y en ese fluir de sentimientos es que he aprendido a quererme mas, a valorarme así como soy. 
Es genial. En mi vida hubo actividades de un solo resultado: tejí un solo sweater. Uno solo entero y completo. Me quedó lindo y extremadamente chico. Lo regalé. Un día me hice un pantalón, con molde y todo. Nunca mas volví a hacer otro. Y me doy maña, mucha...Pero no soy constante. Hace como un año se me ocurrió empezar a escribir un libro, una novela corta. Y vaya que fue corta. Un solo capitulo. La idea esta ahí. Si, pero no hay cabida para seguir... y bueno, que importa? Antes me hubiese mortificado. Pero hoy, ese ir y venir, ese hacer y deshacer, es como una prueba constante de la inconstancia feliz. Con los años uno entiende de la finitud de la vida, y que si en ese tiempo, corto, muy corto, necesitamos estar todo un día leyendo sin parar, está bien. Y si nos apetece dormir, también lo está. Y si queremos levantarnos al alba para ver amanecer, también. Si se nos da estar solos, o en compañía. Si salimos o nos quedamos en casa. Es que de eso se trata vivir. Hacernos siendo. Sin culpas ni culpables; viviendo. 

lunes, 13 de enero de 2014

Del servicio domestico y esas yerbas... Tercera Parte: Chinaaaaaa!!!

 Y si, salió la versión tres... y yo que creía que no iba a escribir sobre esto por largo tiempo... aunque pensándolo bien, tres años, es bastante tiempo, en las épocas que corren no? En fin.
Que les puedo contar, Alta Gracia, de nombre artístico China, para los que no la conocen, la señora que me ayuda en casa.  Con su aire caribeño, sus rulos alocados, sus colores brillantes, su pijama de ositos, las pantuflas de hello kitty, mucha diversión mucha alegría, pero poco plumero y escoba...
Lo mas destacado en mi mundo diario en lo que a ella respecta, es que me sube el café con leche y dos tostadas a la cama...ahhhh!  eso de verdad me alegra el día! Verla en pijama, los rulos al viento, con la bandeja en alto, no tiene precio! Es una imagen imborrable. De verdad, totalmente bizarra. Pero hay que reconocer: Jamás se le vuelca una gota. Trabajó de  moza en algún momento, lo confirme luego.
Que me rio, si, no puedo parar de reírme: es que no lo puedo creer. Pasaron ya unos años y cada vez la confianza es mayor.
Hace un año, me pedía permiso para tomarse una licencia e ir por un mes y medio a Dominicana. Hoy, me informa. Ah, ya saque el pasaje..! te dice, con un borboteo que no se le entiende... definitivamente, no aprendí chino. Su idioma. La mayor parte de las veces no tengo idea de que me habla. Entre las galleticas, la carnita y que le de candela?! Mas un mil y otros términos que aun no he aprendido, solo se que no se nada.
Como si esto fuera poco, enternecida, le prometí que no le iba a descontar la licencia; eran solo dos semanitas esta vez, vi el pasaje de vuelta, fecha con mis propios ojos... porque no iba a creerle...? Estamos hablando de un pasaje que ni yo me puedo comprar... 12 mil pesos te va? En fin. En solo dos semanas estoy de vuelta, me dijo. Ah!, Ud que sabe, puede meterse en afip, que quiero comprar dólares...? me dijo... Tenés que sacar una clave fiscal, China. Ah entonces, voy el lunes. Lunes 3 de la tarde y no había vuelto. Y el niño de la casa solo y sin nadie que le hiciera un Paty, aunque mas no fuera... El cuento sigue. Esa noche, mua, o sea yo, la mas gil de los alrededores, me vi de pronto entrando con su clave fiscal, para gestionarle el permiso para comprar dólares. Pero si era obvio que no se iba a poder...! si no tiene caja de ahorros! Nunca fue a sacarse una! De todas maneras no me la imagino luchando con el cajero automático.
Ya pasó un mes. Y definitivamente no volvió. Aunque antes de irse me pidió que le regalara vino, champaña, turrones y toda otra golosina para pasar las fiestas, cosa que hice con cariño.
Si me preguntas, estos últimos tiempos, cada día,  después de llegar del laburo, ponerme a limpiar, cocinar y demás yerbas... te diría que no aprendo mas! Y encima cuando yo limpio,  me doy cuenta de que si no se iba, quizás el famoso sarro, que ella juraba no salía, me hubiera cubierto todo, o lo mismo la grasa de atrás de los muebles de la cocina, o los pelusones de debajo de algunos muebles, por enumerar alguna que otra tontería...

Hoy estoy aquí sentada escribiendo y pensando si debo esperar o que. QUE!!!! Llamó hace una semana, a mi marido y le dijo que se retrasó. Que en todo caso le descuente la semana. Que semana? Cual semana? CUANDO VOLVES!!!! Eso nunca se sabrá. Posiblemente vuelva cuando le toquen las vacaciones, o sea cuando sean MIS VACACIONES. Y yo no esté para verlo!  La verdad es que los cuentos, prefiero escribirlos yo. Porque seguramente, sean ficciones. Pero esta vez, la realidad, SUPERA LA FICCION. Y les aseguro, que no es mas que un cuento CHINO.